La petrolera Total ha sido declarada por la justicia francesa culpable del desastre del buque Erika, cuyo hundimiento y vertido de crudo ocasionó la mayor catástrofe ecológica del país el 12 de diciembre de 1999. Las 20.000 toneladas de combustible contaminaron 400 km de costas y mataron a 150.000 aves.
El caso Erika es el primer juicio francés debido a un desastre ecológico y en cuya sentencia se reconoce un atentado al medio ambiente. La sentencia declara culpable a Total por imprudencia, relacionada, principalmente, con el estado en el que se encontraba el buque. La multa asciende a sólo 375.000 €, si bien las indemnizaciones a pagar superan los 150 millones de euros. Junto a la petrolera la empresa de certificación Rina -responsable de la inspección del Erika-, el armador del barco -Giuseppe Savarese-, y el gestor del mismo -Antonio Pollara-, han sido condenados con diversas multas.
Se prevé que la petrolera apele la sentencia, de modo que se suspenda el pago de indemnizaciones y multas hasta la espera de un nuevo juicio dentro de un año.
El caso Erika es el primer juicio francés debido a un desastre ecológico y en cuya sentencia se reconoce un atentado al medio ambiente. La sentencia declara culpable a Total por imprudencia, relacionada, principalmente, con el estado en el que se encontraba el buque. La multa asciende a sólo 375.000 €, si bien las indemnizaciones a pagar superan los 150 millones de euros. Junto a la petrolera la empresa de certificación Rina -responsable de la inspección del Erika-, el armador del barco -Giuseppe Savarese-, y el gestor del mismo -Antonio Pollara-, han sido condenados con diversas multas.Se prevé que la petrolera apele la sentencia, de modo que se suspenda el pago de indemnizaciones y multas hasta la espera de un nuevo juicio dentro de un año.
Fuentes: El País / El Mundo
Imagen: marcfavriau
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