Canarias recupera sus parajes naturales

Estos últimos días se han recogido varias noticias en la prensa canaria que demuestran cómo las administraciones canarias trabajan en recuperar y proteger sus espacios naturales.

El Cabildo de Fuerteventura trabaja desde hace años en la creación del Parque Nacional de Fuerteventura, basándose en que esta isla cuenta con unas zonas áridas singulares de gran valor ecológico y unas de las más destacadas de toda Europa. El proyecto está avalado por el Ministerio de Medio Ambiente, si bien su tramitación debe contar con la participación del Gobierno de Canarias. A priori es una gran noticia para la isla y para Canarias, si bien hay quienes ven en este proyecto intereses económicos relacionados con la promoción de ciertos complejos turísticos de la zona y el bloqueo de las zonas rurales afectadas, como se puede leer en los comentarios de la noticia. Esperaremos nuestras noticias.

Complementario a este proyecto, el Cabildo de Fuerteventura está acometiendo la primera campaña de reforestación a nivel insular de iniciativa propia y la segunda en número de ejemplares desde que hace 60 años se creara el Pinar de Betancuria, esperando que se puedan plantar 6.000 nuevos árboles al finalizar la campaña con una supervivencia del 80%. Con esta acción el Cabildo continúa la línea de lucha contra la desertificación y la degradación del territorio. Además, y gracias al trabajo realizado por la empresa Tibicena para el Cabildo, se podrán recorrer el medio centenar de senderos que conectaban toda la isla después de 500 años.

Por su parte Gran Canaria está de enhorabuena. Tras más de 50 años de campañas de reforestación, la isla ha duplicado su superficie de pinares. Sin embargo los incendios han acabado con parte ella, si bien, y al afectar principalmente a pinos jóvenes, se espera que nuevos proyectos de reforestación recuperen estas zonas y los ejemplares puedan alcanzar los 10 años de edad y puedan regenerarse de manera natural después de un incendio. Para conocer mejor la resistencia natural a los incendios del pino canario, especialista alemanas han estudiado el estado de conservación de algunos pinos centenarios también con el fin de diseñar la mejor estrategia de conservación en aquellos más singulares ante un posible riesgo de desplome.

Y en Lanzarote siguen los estudios y contactos con los propietarios para que los islotes de Montaña Clara y Alegranza pasen a ser de titularidad pública. En la actualidad se está llevando a cabo el deslinde del dominio público marítimo-terrestre en todo el Archipiélago Chinijo (como se denomina al conjunto de islotes al norte de la isla de Lanzarote), lo que facilitará posteriormente las negociaciones para la adquisición de aquellos terrenos. Esta compra permitiría resolver una situación de manera favorable para todos, pues la sociedad recibiría unos terrenos de alto valor ecológico para su conservación y los propietarios obtienen un beneficio hasta ahora impedido por la clasificación de los suelos. Soy partidario de que este tipo de negociaciones se realicen para todos aquellos suelos cuya protección es tal que los propietarios no pueden ni construir, ni cultivar ni obtener ningún tipo de beneficio porque están "destinados" a la conservación del paisaje natural para beneficio de todos; por lo que, en estos casos, el terreno debería ser público y por tanto la administración competente debería estar obligada a adquirirlo y mantenerlo en esas condiciones (lógicamente...).

Fuentes: La Provincia (1) (2) (3) (4) (5) / Canarias7
Imagen: pinzonazul