Hace un tiempo leí el artículo "Asociacionismo creativo" en Flylosophy.com y me llamó mucho la atención. ¿Unirse para realizar compras? ¿trueques? ¿intercambio de servicios?... Puede sonar extraño, pero este tipo de actividades se están popularizando en muchos países, y también en España. ¿Una solución creativa para sobrellevar mejor la crisis económica?. No sólo eso, el algunos casos también genera un beneficio social y ambiental.
Una de las más curiosas son los bancos de tiempo. Es una herramienta que permite intercambiar principalmente servicios, donde la "moneda" es el tiempo empleado. Existen ya varios en España, como el Banco del Tiempo de San Javier o el Bancs del Temps de Barcelona. Generalmente están coordinados por administraciones públicas y tienen un trasfondo solidario y de cohesión de la comunidad. Así, si sabes desatascar cañerías, puedes ofrecer este servicio a cambio de que te arreglen el jardín o te den asesoramiento financiero. Kroonos es un banco del tiempo online que recoge favores y peticiones entre particulares de todo el mundo.
Y el trueque comercial, sin dinero de por medio, también vuelve. Acambiode es uno de los sitios más populares de Internet para intercambiar productos y servicios entre empresas. Su base de datos agrupa a casi 180.000 empresas, 58.000 de España. A nivel particular también puedes intercambiar productos en otros sitios webs como Cambia.es. Puedes encontrar otros sitios similares en Sindinero.org. El trueque, como la compra de productos de segunda mano, es una actividad sostenible en cuanto evita la generación de residuos y permite reutilizar los productos alargando su vida útil.
Seguramente habrás oído o leído sobre los Clubs de Compras. Generalmente son servicios adicionales de empresas, bancos, etc. que ofrecen un catálogo de productos a sus miembros, de manera que aquellos se obtienen por un precio inferior al de mercado. También puedes encontrar clubes de compra en Internet para particulares. Pues bien, esto es una evolución de un movimiento que ya tienes algunos años: los grupos de compras. La idea es juntarse un grupo de personas (por ejemplo vecinos) que desean comprar lo mismo y conseguir del vendedor un descuento. Existen muchos en Estados Unidos -incluso dedicados específicamente a comprar productos ecológicos-, y he encontrado también grupos en Latinoamérica. En España no es muy común encontrar grupos estables de compra, sin embargo hay algún que otro ejemplo como el de los Vecinos de Riells y Viabrea. La mayoría de grupos de compras que he encontrado en Internet en España suelen ser temporales y organizados espontáneamente a través de foros de sitios webs para adquirir un producto determinado (ej: un recambio para un modelo de coche concreto). Aunque más bien como forma de protesta por los altos precios en la alimentación, la Asociación de Consumidores y Usuarios de Lanzarote organizó en mayo de 2008 una caravana de consumidores que viajó a Gran Canaria para comprar en una gran superficie, y de paso lograr un descuento en la factura. En Internet podemos encontrar el sitio Tuangou que pretende facilitar la creación de grupos de compra a través de la publicación de anuncios para realizar una compra determinada en una tienda concreta, convocando así a otras personas interesadas y logrando mejores precios en grupo.
Pero el movimiento cooperativo también llega al hogar en sí. El cohousing o covivienda es una comunidad de viviendas que tienen una serie de espacios comunes que gestionan de manera comunitaria, que generalmente son comedores y cocinas pero que pueden incluir también salones, lavanderías, guarderías, etc. Este movimiento, que se inició en Dinamarca en los años 60 del siglo XX, se ha ido popularizando y en muchos casos suelen estar constituidos por personas interesadas en la ecología, las sostenibilidad y la vida en el campo. Por esta razón, algunas se denominan ecoaldeas o ecovillas. En España tenemos ya algunas comunidades de este tipo, como la Ecoaldea de Valdepiélagos de viviendas bioclimáticas o la que se está gestando en Gran Canaria.
Todas estas formas de asociacionismo y cooperación son ejemplos de otras maneras de alcanzar estilos de vida más sostenible basados en la acción como grupo, que generan un beneficio para sus miembros a la vez que, en algunos casos, sus actividades fortalecen el tejido social.
Fuente: Flylosophy
Imagen: fotomacs
Una de las más curiosas son los bancos de tiempo. Es una herramienta que permite intercambiar principalmente servicios, donde la "moneda" es el tiempo empleado. Existen ya varios en España, como el Banco del Tiempo de San Javier o el Bancs del Temps de Barcelona. Generalmente están coordinados por administraciones públicas y tienen un trasfondo solidario y de cohesión de la comunidad. Así, si sabes desatascar cañerías, puedes ofrecer este servicio a cambio de que te arreglen el jardín o te den asesoramiento financiero. Kroonos es un banco del tiempo online que recoge favores y peticiones entre particulares de todo el mundo.
Y el trueque comercial, sin dinero de por medio, también vuelve. Acambiode es uno de los sitios más populares de Internet para intercambiar productos y servicios entre empresas. Su base de datos agrupa a casi 180.000 empresas, 58.000 de España. A nivel particular también puedes intercambiar productos en otros sitios webs como Cambia.es. Puedes encontrar otros sitios similares en Sindinero.org. El trueque, como la compra de productos de segunda mano, es una actividad sostenible en cuanto evita la generación de residuos y permite reutilizar los productos alargando su vida útil.Seguramente habrás oído o leído sobre los Clubs de Compras. Generalmente son servicios adicionales de empresas, bancos, etc. que ofrecen un catálogo de productos a sus miembros, de manera que aquellos se obtienen por un precio inferior al de mercado. También puedes encontrar clubes de compra en Internet para particulares. Pues bien, esto es una evolución de un movimiento que ya tienes algunos años: los grupos de compras. La idea es juntarse un grupo de personas (por ejemplo vecinos) que desean comprar lo mismo y conseguir del vendedor un descuento. Existen muchos en Estados Unidos -incluso dedicados específicamente a comprar productos ecológicos-, y he encontrado también grupos en Latinoamérica. En España no es muy común encontrar grupos estables de compra, sin embargo hay algún que otro ejemplo como el de los Vecinos de Riells y Viabrea. La mayoría de grupos de compras que he encontrado en Internet en España suelen ser temporales y organizados espontáneamente a través de foros de sitios webs para adquirir un producto determinado (ej: un recambio para un modelo de coche concreto). Aunque más bien como forma de protesta por los altos precios en la alimentación, la Asociación de Consumidores y Usuarios de Lanzarote organizó en mayo de 2008 una caravana de consumidores que viajó a Gran Canaria para comprar en una gran superficie, y de paso lograr un descuento en la factura. En Internet podemos encontrar el sitio Tuangou que pretende facilitar la creación de grupos de compra a través de la publicación de anuncios para realizar una compra determinada en una tienda concreta, convocando así a otras personas interesadas y logrando mejores precios en grupo.
Pero el movimiento cooperativo también llega al hogar en sí. El cohousing o covivienda es una comunidad de viviendas que tienen una serie de espacios comunes que gestionan de manera comunitaria, que generalmente son comedores y cocinas pero que pueden incluir también salones, lavanderías, guarderías, etc. Este movimiento, que se inició en Dinamarca en los años 60 del siglo XX, se ha ido popularizando y en muchos casos suelen estar constituidos por personas interesadas en la ecología, las sostenibilidad y la vida en el campo. Por esta razón, algunas se denominan ecoaldeas o ecovillas. En España tenemos ya algunas comunidades de este tipo, como la Ecoaldea de Valdepiélagos de viviendas bioclimáticas o la que se está gestando en Gran Canaria.
Todas estas formas de asociacionismo y cooperación son ejemplos de otras maneras de alcanzar estilos de vida más sostenible basados en la acción como grupo, que generan un beneficio para sus miembros a la vez que, en algunos casos, sus actividades fortalecen el tejido social.
Fuente: Flylosophy
Imagen: fotomacs
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