El Observatorio de la Electricidad de WWF/Adena ha detectado que en octubre de 2008 pasado, por primera vez desde 1994, se ha reducido el consumo de electricidad en España. A primera vista podría ser esperanzador...
Sin embargo, la realidad es que la reducción ha tenido más que ver con la crisis económica que con un estilo de vida sostenible. En cualquier caso no deja de ser una noticia positiva, que demuestra que tenemos capacidad para reducir nuestro consumo energético. Es más, es una oportunidad ideal para incentivar un cambio de actitud en la población. Los ciudadanos estamos más receptivos porque el derroche de energía nos supone una carga económica, más que nunca, innecesaria.
La Administración pública debería lanzar ahora campañas de ahorro energético (reducción del consumo, adquisición de electrodomésticos más eficientes, etc.) que en estos momentos pienso que serían bien acogidas por la población porque aparte de contribuir a la sostenibilidad y a la reducción de emisiones de gases invernadero, fomentaría también un ahorro económico en nuestros bolsillos. ¿Por qué esperar a que los consumos sean elevados para iniciar campañas de ahorro energético? Actuar en estos momentos permite que las campañas se beneficien de un mayor calado en la sociedad y puede constituir un punto de inflexión más firme hacia actitudes ambientalmente más responsables. Lo mismo ocurre con el agua. Las campañas de ahorro y eficiencia hídrica deberían iniciarse ahora que este invierno está siendo más húmedo que años anteriores, para así poder llegar al próximo verano con agua suficiente para sobrellevar mejor la sequía estival.
Por cierto, desde la Cámara de Comercio de Las Palmas me informan de que ya está abierto, y hasta febrero de 2009, el plazo para solicitar en el Gobierno de Canarias las subvenciones para la realización de actuaciones que fomenten el ahorro y la eficiencia energética.
Fuente: Portal del Medio Ambiente
Imagen: vancanjay
Sin embargo, la realidad es que la reducción ha tenido más que ver con la crisis económica que con un estilo de vida sostenible. En cualquier caso no deja de ser una noticia positiva, que demuestra que tenemos capacidad para reducir nuestro consumo energético. Es más, es una oportunidad ideal para incentivar un cambio de actitud en la población. Los ciudadanos estamos más receptivos porque el derroche de energía nos supone una carga económica, más que nunca, innecesaria.La Administración pública debería lanzar ahora campañas de ahorro energético (reducción del consumo, adquisición de electrodomésticos más eficientes, etc.) que en estos momentos pienso que serían bien acogidas por la población porque aparte de contribuir a la sostenibilidad y a la reducción de emisiones de gases invernadero, fomentaría también un ahorro económico en nuestros bolsillos. ¿Por qué esperar a que los consumos sean elevados para iniciar campañas de ahorro energético? Actuar en estos momentos permite que las campañas se beneficien de un mayor calado en la sociedad y puede constituir un punto de inflexión más firme hacia actitudes ambientalmente más responsables. Lo mismo ocurre con el agua. Las campañas de ahorro y eficiencia hídrica deberían iniciarse ahora que este invierno está siendo más húmedo que años anteriores, para así poder llegar al próximo verano con agua suficiente para sobrellevar mejor la sequía estival.
Por cierto, desde la Cámara de Comercio de Las Palmas me informan de que ya está abierto, y hasta febrero de 2009, el plazo para solicitar en el Gobierno de Canarias las subvenciones para la realización de actuaciones que fomenten el ahorro y la eficiencia energética.
Fuente: Portal del Medio Ambiente
Imagen: vancanjay
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