La investigadora de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), Margarita Calafell, y su equipo han desarrollado un nuevo material a partir de residuos de papel de alta calidad.
[caption id="" align="alignleft" width="240" caption="Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial y Aeronáutica de Terrassa (UPC)"]
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Lo primero que quiere destacar su creadora es que este material, creado mediante biotecnología, no es un aglomerado sino un verdadero nuevo material, al que aún no han puesto nombre, con propiedades únicas y uniformes. Estas propiedades únicas se refieren a que el material es compacto, moldeable, ignífugo, impermeable, resistente y poroso. Por ello, se aventura ya que este nuevo material podría servir para sustituir a otros materiales más caros y menos respetuosos con el medio ambiente en campos como el embalaje o el aislamiento térmico y sonoro en la edificación. Otro detalle importante, es que por cada kilogramo de residuo celulósico (papel) se obtiene otro kilogramo del nuevo material, siendo su método de producción muy eficiente.
Este nuevo material y su método de obtención ya han sido patentados y no sería de extrañar que ya hubieran fabricantes interesados. Además, este proceso biotecnológico podría aplicarse a otros residuos como los poliméricos (plásticos) y al caucho procedente de neumáticos fuera de uso.
Fuente: SINC
Imagen: bernatbernat
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[/caption]Lo primero que quiere destacar su creadora es que este material, creado mediante biotecnología, no es un aglomerado sino un verdadero nuevo material, al que aún no han puesto nombre, con propiedades únicas y uniformes. Estas propiedades únicas se refieren a que el material es compacto, moldeable, ignífugo, impermeable, resistente y poroso. Por ello, se aventura ya que este nuevo material podría servir para sustituir a otros materiales más caros y menos respetuosos con el medio ambiente en campos como el embalaje o el aislamiento térmico y sonoro en la edificación. Otro detalle importante, es que por cada kilogramo de residuo celulósico (papel) se obtiene otro kilogramo del nuevo material, siendo su método de producción muy eficiente.
Este nuevo material y su método de obtención ya han sido patentados y no sería de extrañar que ya hubieran fabricantes interesados. Además, este proceso biotecnológico podría aplicarse a otros residuos como los poliméricos (plásticos) y al caucho procedente de neumáticos fuera de uso.
Fuente: SINC
Imagen: bernatbernat
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