Soitu, el diario online surgido hace hoy 22 meses, se despide tras no poder convencer al BBVA para que siguiera apoyando este proyecto mediático como principal inversor.
Soitu me llamó la atención por su modernidad, por contar las noticias con personalidad y con un lenguaje muy claro y directo con el que explicaban las cosas sin rodeos. Además, desde el principio se volcó con desarrollar todo tipo de aplicaciones dirigidas a Internet y a los lectores/internautas, y su estructura similar a un blog lo hacía muy cómodo de leer.
Sin embargo, desde nuestra perspectiva ambiental, también era un sitio destacado. Mantenía dos secciones claramente relacionadas con el movimiento verde (cuando en muchos otros diarios las noticias ambientales andan dispersas en las secciones de ciencia, sociedad o incluso tecnología): “Medio ambiente” y “Hartos del coche”. Pero no sólo eso, además contaban con colaboradores que sabía muy bien de qué hablaban: ambientólogos, miembros de ONGs ambientales, profesores universitarios, ingenieros, etc. Escribían interesantes artículos muchas veces sobre temas que no formaban parte precisamente del batiburrillo mediático diario, pero que tenían igual o más interés.
Desde aquí les deseo mucha suerte a todos los integrantes de Soitu, y espero que podamos volver a ver este proyecto en marcha en el futuro.
Soitu me llamó la atención por su modernidad, por contar las noticias con personalidad y con un lenguaje muy claro y directo con el que explicaban las cosas sin rodeos. Además, desde el principio se volcó con desarrollar todo tipo de aplicaciones dirigidas a Internet y a los lectores/internautas, y su estructura similar a un blog lo hacía muy cómodo de leer.
Sin embargo, desde nuestra perspectiva ambiental, también era un sitio destacado. Mantenía dos secciones claramente relacionadas con el movimiento verde (cuando en muchos otros diarios las noticias ambientales andan dispersas en las secciones de ciencia, sociedad o incluso tecnología): “Medio ambiente” y “Hartos del coche”. Pero no sólo eso, además contaban con colaboradores que sabía muy bien de qué hablaban: ambientólogos, miembros de ONGs ambientales, profesores universitarios, ingenieros, etc. Escribían interesantes artículos muchas veces sobre temas que no formaban parte precisamente del batiburrillo mediático diario, pero que tenían igual o más interés.
Desde aquí les deseo mucha suerte a todos los integrantes de Soitu, y espero que podamos volver a ver este proyecto en marcha en el futuro.
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